DANIEL VIDAL "Recuerdos de Albisinia"

DANIEL VIDAL

Recuerdos de Abisinia
03/10/2013 - 24/10/2013
ESEADE, Espacio de Arte
Uriarte 2472 - Buenos Aires.

Recuerdos de Abisinia, por Patricia Casartelli (curadora ESEADE) En la obra de Daniel Vidal está presente la idea de sedimento, de reminiscencias, hay superposiciones de elementos dispares, heterogéneos, que se velan o revelan, generando una imagen evocativa que nos invita a descifrarla. Da cuenta de ello los nombres de algunas de sus series como “Palimpsestos” o “Figuras reminiscentes”. Hay también, una convivencia entre la forma geométrica (que aparece en algunos casos de forma definida, contundente y en otras de manera más sutil, insinuada) y la mancha que aporta un aspecto informal, menos controlado y que permite la entrada de lo azaroso, no como algo casual sino como un hecho deseado.

Este contrapunto racional/emotivo que se plantea en la obra de Vidal se lo puede rastrear desde sus comienzos, aún en aquellas series donde la forma geométrica es sólida, pregnante, siempre aparece lo sensible de manera subyacente. En sus principios el artista tenía una mayor identificación con la pintura de Torres Garcia y Alfredo Hlito, con la visión constructiva de uno y las imágenes totémicas del segundo. Luego transitó una cercanía con la pintura geométrica de borde duro, sin rendirse totalmente a ella, dando muestras siempre de un aspecto más sensible. Las obras elegidas para esta muestra pertenecen a la serie “Diario de Abisinia”, en esta serie hay un cambio de tono, donde lo geométrico pareciera perder territorio. El nombre es tomado de la vida de Rimbaud, cuando el joven, precoz poeta abandona su vida en Europa y viaja a Africa.Esa imagen, la de Rimbaud en Abissinia, le sirvió al artista como disparador de esta serie, estos cuadros son el diario imaginario del poeta. Daniel Vidal utiliza recursos heredados de diferentes momentos de la historia del arte de los que se vale para construir una obra con sedimentos, con imágenes recurrentes que se combinan y superponen veladamente. A partir de un fondo poco trabajado en donde en algunos casos se llega a traslucir el lienzo,el artista genera una imagen no delimitada, con impronta informalista, trabajada a fuerza de materia pictórica, con sustancias que generan veladuras, dilucionesy recursos que imprimen textura a la obra. Utiliza con libertad diversas técnicas y materiales como acrílico, pintura asfáltica, aerógrafo, impresiones hechas directamente con elementos saturados en pintura;por momentos incluso toma de la actionpainting su actitud corporal, trabajando con el lienzo en el piso, dando rienda libre a la forma, al juego del azar que luego interviene con formasgeométricas, más definidos, más controlados o elementos de su propia caja de recuerdos, de sus memorias, de su propio archivo de elementos reminiscentes que se repiten y brotan en su obra como material inconciente.
Estamos ante un tiempo que “no es exactamente el pasado” sino que tiene el nombre de “memoria”…”es ella la que humaniza y configura el tiempo, entrelaza sus fibras, asegura sus transmisiones, consagrándolo a una impureza esencial…la memoria es psíquica en su proceso, anacrónica en sus efectos de montaje, de reconstrucción o de decantación del tiempo” ….“tiene su anclaje en el inconsciente.”
Es Vidal que juega a ser Rimbaud, aquel poeta que en las “Cartas del Vidente” se atreve a decir “yo es otro” , y en ese imaginar pintaAbissinia, Harar, Reina de Java, cabezas con reminiscencias africanas sin haber estado nunca allí. Jugando a ser ese otro,(el poeta de la precoz e intensa vida que abandona todo en aras de otras intensidades) Vidal produce esta serie en donde pone en juego imaginación, memorias y materia.